El sábado 18 de octubre de 2014, nos hemos reunidos en el Monasterio Nuestra Señora del Carmen y San José de las Carmelitas Descalzas de Los Chorros en la ciudad de Caracas; los frailes y estudiantes de la Delegación General Santa Teresa de Los Andes nos hemos movilizado a esta ciudad para dar inicio al año jubilar en honor al Vº Centenario del Nacimiento de nuestra Santa Madre Teresa de Jesús, junto a nosotros han compartido esta gran alegría nuestros hermanos y hermanas del Carmelo Seglar, representantes de nuestros grupos laicales, al igual que miembros de las diversas comunidades religiosas. Las Carmelitas Descalzas de Caracas han sido las anfitrionas, quienes han adornado de manera sobria pero elegante la Iglesia y con su cariño y cercanía han inundado el lugar. 
Qué mejor lugar para iniciar este año jubilar que reunirnos en torno a la mesa del Señor para dar gracias a Dios por el don de Teresa de Jesús a la Iglesia y al Carmelo. La Eucaristía estuvo presidida por el Nuncio de Su Santidad en Venezuela Monseñor Aldo Giordano, quien manifestó abiertamente su agrado por estar en medio de esta familia compartiendo tan grande acontecimiento para la Iglesia en Venezuela y de manera particular para la Orden del Carmelo Descalzo en este país.
Desde tempranas horas de la mañana se movilizaron al lugar hermanos y hermanas procedentes de las distintas partes del país. Un ambiente bendecido y lleno de fraternidad se respiraba desde la entrada del Monasterio hasta la Iglesia de nuestras Madres Carmelitas, caras conocidas y desconocidas, pero cada una de las personas allí congregadas habían asistido para vivir la experiencia a la cual habíamos sido convocados: Celebrar el inicio de este año jubilar en honor a nuestra Madre y Fundadora.
Previo al inicio de la Eucaristía se proyectó el documental producido por el Colegio Internacional Teresiano Sanjuanista (CITES) de España, titulado: “La Mística hecha palabra. Santa Teresa de Jesús, escritora”.
Con la monición ambiental se daba inicio a la Celebración, seguida de la magistral interpretación del Himno del Vº Centenario “Maestra de la luz” a cargo de la Coral Betania, quienes aceptaron gustosamente la invitación de animar nuestra celebración.
La procesión de entrada estuvo encabezada por la Reliquia de nuestra santa Madre Teresa de Jesús. Un Pregón previo al Gloria adornó la celebración, en él se recogía cada acontecimiento importante de la vida de nuestra querida santa y finalizaba con la invitación a una vivencia profunda de encuentro con su vida y doctrina en este marco tan maravilloso que el Señor nos ha regalado del Vº Centenario de su nacimiento (28 de marzo 1515-2015).
La homilía de Mons. Giordano destacó aspectos importantes de la Carta enviada por el Papa Francisco al Obispo de Ávila con motivo de la apertura del año jubilar en España, resaltando a Teresa como la “Santa del Camino”. Al final de la nota se anexa la homilía.
En este ambiente de encuentro y oración se vivió la celebración eucarística, cada canto, cada lectura, cada palabra nos hizo experimentar la gran cercanía de nuestra Santa Madre. Su invitación nos lleva a discernir los signos de los tiempos, su llamada es a adentrarnos en nosotros mismos para contemplar la experiencia del Dios Amigo. Tal como lo manifiesta ella en el libro de su Vida: “Que esto es siempre lo que han de pretender, y solas con Él solo” (36, 29).
Que la apertura de este año jubilar sea de mucha bendición para nuestro país en estos momentos tan cruciales que vivimos, que ella nos conceda la gracia de ser luz y guía para cuantos necesitan encontrar el camino hacia las profundidades del ser donde habita el Rey. Y que su mano nos alcance la gracia de ser fieles al carisma recibido y ser transmisores de su vivencia y experiencia hoy a cuantos más lo están necesitando.
Podemos finalizar citando las palabras de nuestro Padre General Fr. Saverio Canistrà en su carta del 15 de Octubre con motivo del inicio de este Vº Centenario:
«Creo que Teresa nos está diciendo lo que San Pablo decía a sus discípulos de Corinto: vosotros mismos sois mi carta de recomendación, “escrita no con tinta, sino con el Espíritu del Dios vivo, no sobre tablas de piedra, sino sobre las tablas de carne de vuestros corazones” (2 Cor 3, 2-3).
En conclusión: ¿A dónde nos lleva el Centenario de Teresa? Nos lleva a nuestros corazones, el lugar donde habita nuestra verdad y la verdad del Dios vivo. Que ellas se encuentren en el nombre y siguiendo las huellas de la Santa: esta es la única celebración que podrá alegrar el corazón de la Madre y hacerle sentir la fecundidad de su búsqueda, de su lucha, de su infatigable peregrinar.
¡Gracias, Teresa, porque no para ti, sino, verdaderamente, para todos nosotros has nacido!»
