"El Consejo de la Delegación junto con el Párroco iniciará el diálogo con el Arzobispado de Caracas en vista al convenio o entrega de la Parroquia San José Obrero, mientras no se puedan tener tres frailes en cada comunidad, evaluando las mejores opciones para la Orden y para la Parroquia." (Conclusiones Operativas N 17)
viernes, 29 de julio de 2011
Resultados del Capítulo de Delegación
sábado, 23 de julio de 2011
Renovación de Votos en Guatemala
lunes, 18 de julio de 2011
Inicio del Noviciado 2011 - 2012
sábado, 16 de julio de 2011
Profesión de nuestros hermanos de Lepaterique

jueves, 14 de julio de 2011
Los carmelitas y la Virgen del Carmen



- Primero es un momento propicio para purificar esta devoción de la superstición que confunde al escapulario con un amuletoo talismán. No se puede ver al escapulario como un salvo conducto en la vida sino como un estímulo constante de la vida cristiana.
- Segundo nos invita a centrar la devoción del escapulario en imitar, en nuestras vidas presentes, las virtudes de la virgen para poder participar de las realidades futuras. Tal vez la virtud mariana que más resalta en el Carmelo es la escucha contemplativa de la Palabra de Jesús y por tanto la obediencia de la feque pone por obra lo contemplado en el corazón (Cf Lc 2,19); en ese sentido la devoción del escapulario es una invitación a la práctica de la vida de oración. Al trato amistoso y constante con quien sabemos nos ama y a la transformación de la vida que lleva consigo esa experiencia de amistad con Dios.
- Otro desafío es recobrar el valor del escapulario como signo de la amable presencia de la Madre de Dios. Así cómo en otro tiempo ella animó el coraje de los evangelizadores, hoy nos da la confianza para asumir con audacia los riesgos de la nueva evangelización. Desde hace varios años nuestros pastores nos vienen invitando vivamente a emprender la nueva evangelización del mundo contemporáneo. Este llamado se está convirtiendo cada vez más en urgencia ante el deterioro progresivo de la convivencia humana en muchos ámbitos. Estamos en un tiempo difícil, hay que asumir importantes riesgospara llegar a la nueva evangelización. Frente a todos estos nuevos riesgos, se nos invita a salir de las trincheras de falsas seguridades y mirar con esperanza y valentía el porvenir. María de nuevo se nos presenta como Estrella del mar en medio del tempestuoso mar de la vida y compañera inseparable en las luchas del camino.
- Finalmente, el escapulario nos debe hacer crecer en la conciencia de ser hermanados por la Madre de Jesús en torno a su hijo. Es decir que tanto el evangelizador como el evangelizado son sobre todo hermanos en Cristo y María es el signo de ello. Dicho de otro modo, la devoción del Carmen es en cierto sentido la devoción de la “Madre de los hermanos” en Cristo.Esta conciencia de hermanos es sumamente urgente en un mundo dividido por guerras, discordias, ideologías y muchas otras formas de desunión.
lunes, 11 de julio de 2011
Carta abierta a Doña Antonia que se nos fue al cielo
Querida mamá. Al cumplirse el novenario de tu partida, nada más apropiado para esta carta abierta que el mensaje de una de tus nietas estremecida por tu ausencia:
“Tío Pepe, nada mas decir que más que una abuela era una Madre de Madres, y Madre del Amor. Todos cuantos tuvimos la dicha de compartir parte de nuestra vida con ella recibimos su amor, su carisma, sus besos, sus enseñanzas, sus demostraciones infinitas de fe, serenidad y fortaleza y sus deliciosas comidas hechas con amor de una madre. Al mismo tiempo mujer enamorada del tango, del amor. Se ha ido entre fiestas de verano, en víspera de San Pedro, se aseguró primero de que no estuviésemos solos, nos envió emisarios. Anoche mismo la lloraba entre abrazos de mis hijos y los fuegos artificiales en el ocaso que iluminaban el cielo y me recordaban que también debemos celebrar su partida con la fe en una merecida vida celestial en la que tanto creyó. Brindo por mi abuela y porque ahora y siempre estará con nosotros.”
Creemos mamá que estas palabras retratan cabalmente tu paso por esta tierra.
Hoy podemos decir como es hermoso canto mariano: “Era una mujer sencilla una mujer tranquila, una mujer como otras, pero con un alma grande, con un gran amor en el corazón… Dijo si y no preguntó por qué, amó y no preguntó por qué… pero sobre todo lo divino, ella tuvo mucha fe.” Si mamá. Gracias por el ejemplo de tu fe inquebrantable aún en los momentos más duros. Gracias porque ente nuestras acrobacias académicos acerca del dolor humano, un día nos dijiste: “Hijos, ¿por qué hablan tanto de traumas?, ¿más de los que he sufrido yo? Y mi psiquiatra ha sido Cristo”. Afirmación rotunda que te retrata de cuerpo entero. La fe en Jesucristo y el misterio de la Cruz fueron los baluartes de tu vida hasta que tus ojos se cerraron suavemente con la dulce paz de los elegidos. Pero tu fe y tu Cruz dieron como fruto la fragancia de tu amor exquisito, universal, sin límites.
Todos tus hijos, nietos, bisnietos, yernos, nueras, cuñados, amigos y amigas innumerables, experimentamos tu tierno amor desconocedor siempre del egoísmo o el rencor.
Nos transmitiste siempre tu suave y muchas veces pícara alegría, salpicada siempre de tus afirmaciones cargadas de agudo realismo. Derrochaste sabiduría enmarcada en tu proverbial sencillez. Te preocupaste por todos y cada uno en su estricta e irrepetible individualidad, guardando siempre a cada persona en tu corazón y en tu oración. Porque sobre todo eso mamá, orabas sin cesar y toda nuestra gran familia accedíamos a ti por oraciones con la certeza de que eran escuchadas. “Dios siempre me escucha” nos decías, con la confianza propia de los hijos que se saben amados por su Padre.
Gracias María Antonia porque nos enseñaste a perdonar, porque supiste reír y llorar, bailar y cantar, callar y orar en su justo momento. Gracias por lo agradecida que fuiste con Dios y con la vida. Y ¿sabes qué? Gracias porque no fuiste absolutamente prefecta y nos permitiste palpar tu fragilidad humana y esto nos hace aún sentirte más cercana y más nuestra.
En el recuerdito de tu despedida pusimos en texto emblemático de Santa Teresita: “Quiero pasar mi cielo haciendo el bien en la tierra”, porque sabemos que ahora allá, en la vida eterna, continuarás pendiente de todos y cada uno, en la alabanza gozosa de la Trinidad y en la solícita intercesión por todos y cada uno de los que amaste en este mundo.
Mamá, mamita, de todo corazón Gracias, Mil gracias por tu paso maravilloso en nuestras vidas.
Tus hijos, nietos, biznietos y demás familiares y amigos.
José Ramón Castañeda.
miércoles, 6 de julio de 2011
Oración por el Congreso Capitular
Fraternalmente,
Fr Daniel
Padre Santo, que en tu hijo Jesús nos has revelado los tesoros de tu amor, queremos proclamarte como el único necesario en nuestra vida. Te pedimos nos ayudes en la búsqueda de tu proyecto sobre nosotros, donde se manifiesta la verdad más profunda de lo que somos en el presente y de lo que estamos llamados a ser en el futuro.
Jesús, "bien de todos los bienes" (V 21,5), buena noticia del Padre en quién descubrimos la verdad, te confesamos como nuestro "nuestro dechado y maestro" (C 36,5). Pedimos, a ti amigo verdadero nos concedas la plena conversión de nuestras vidas de tal modo que nos dejemos evangelizar y podamos nuevamente escuchar como buena noticia la "verdadera verdad" (V 21,9) de nuestra vocación teresiana, que tanto sabe de comunión contigo, de oración e interioridad.
Espíritu Santo, poder santificador del Padre y del Hijo, enciende en nosotros "el espíritu de sabiduría y revelación" (Ef 1,17) a fin de que renueves en nosotros el conocimiento de Dios y la memoria de la esperanza en la que está asentada nuestra vocación.
Te entregamos el VII Congreso Capitular de la Delegación "Santa Teresa de los Andes" de los Carmelitas Descalzos en Venezuela, a fin de que con tu iluminación podamos acertar en todo aquello que manifieste nuestra fidelidad al proyecto evangélico y carismático.
Que María, la Reina y Madre del toda la familia del Carmelo, sostenga y anime nuestra búsqueda a fin de que todos podamos hacer lo que Él nos diga, Amén.
(Oración compuesta por Fr. Publio)
sábado, 2 de julio de 2011
IV CONGRESO EUCARÍSTICO NACIONAL: “JESÚS, PAN DE VIDA PARA VENEZUELA”
“ El lema de este Congreso Eucarístico debe constituir un desafío y un compromiso: de nuestra santidad, testimonio y entusiasmo dependerá que nuestro apostolado despierte y concientice en nuestras comunidades que Cristo es Pan de vida para nuestro pueblo. Desde la vivencia de este Congreso Eucarístico y en la continuidad de la misión evangelizadora de la Iglesia en nuestra Patria nos hemos propuesto: reconocer, profundizar y celebrar el misterio y el don de la Eucaristía; fortalecer la fe y el testimonio de cada uno como Iglesia; centrar la pastoral evangelizadora, renovadora y misionera en la celebración de la Eucaristía; y orar fervientemente por la abundancia de vocaciones al servicio sacerdotal y a la vida consagrada”
(MENSAJE FINAL DEL CONGRESO, 4